Por una senda oscura y solitaria: literatura, cine y arte de horror #14, una columna de Ernesto Moreno
La directora francesa Julia Ducournau ha sido la segunda mujer en llevarse la Palma de Oro en el Festival de Cannes del 2021, con su transgresora película Titane, que ha causado una ola de críticas, reprobaciones y alabanzas por igual. Me parece que una película que cause tantas molestias es digna de verse. Prepárense para buscar y ver el nuevo film de la creadora de Raw (2016), ¿recuerdan aquella historia tremenda de caníbales modernas?, pues esta nueva producción está todavía peor, ¿o mejor?
Sinopsis: Cuenta la historia de Alexia, una niña que tras sufrir un accidente automovilístico, es operada y para salvarle la vida, le injertan en la cabeza una placa de titanio, al salir del hospital, besará con agradecimiento al auto que la lastimó. Al crecer, vemos a una joven que se dedica a realizar bailes eróticos en festivales de autos, siendo una especie de celebridad de ese sub mundo.
Después de una escena muy bizarra, en donde parece tener relaciones sexuales con un auto, Alexia comienza una ola de asesinatos que la obligarán a esconderse para escapar de la cárcel. Al fin, se hace pasar por el hijo desaparecido de un jefe de bomberos llamado Vincent, quien la cuidará y protegerá, aun cuando sabe que no es en realidad su hijo.
Comentarios: Esta es sin duda una película que me mantuvo al margen de la butaca todo el tiempo, me gustó, pero no la volvería a ver. Soy de la opinión de que forma parte de la nueva ola del extremismo francés, que como sabemos, aborda temas del cuerpo, la sexualidad, la violencia y las estructuras sociales.
La propuesta de Ducournau es compleja, no es fácil. Intenta, me parece, tocar los temas de género, en donde la protagonista no tiene problema en ser mujer u hombre según le convenga, además de disfrutar la intimidad con automóviles, no con seres humanos, a los que más bien usa y luego desecha. La ola de asesinatos que lleva a cabo no parece tener un objetivo o causa, asesina a quien se le cruce por igual, ya que la desconexión que tiene con sus congéneres está presente desde su infancia, basta analizar la relación fría y funcional que tiene con sus padres.
El tema de la nueva carne está presente, ya que durante la película seremos testigos de cómo Alexia va transformando su cuerpo para pasar desapercibida y entrar en el “mundo de los hombres”, en donde no tiene problema para transformarse en uno (golpeándose la cara en un lavadero y usando fajas para esconder sus pechos), aunque al mismo tiempo, su cuerpo también se ve deformado por algo que está fuera de su control, un embarazo automovilístico que cada vez es más difícil de ocultar (litros de aceite y metal están creciendo en sus entrañas).
Los estereotipos de género y lo que se supone que debe ser un hombre o una mujer se ve trastocado en esta historia, en donde al parecer, nada es lo que parece. El mundo de los bomberos representa la masculinidad extrema, en donde la fuerza, la homofobia y el control están presentes. Con la ayuda de Vincent, Alexia podrá insertarse en ese mundo extraño, en donde paradójicamente, encontrará algo que nunca tuvo con su familia: el amor incondicional de un padre.
El personaje de Vincent es muy interesante y complicado, ya que representa una fuerza que intenta darle orden y coherencia a la nueva realidad de Alexia, en donde ella no quiere ser madre (intenta abortar). El amor incondicional que varias veces le demuestra, termina por convencerla y comenzar a confiar en él. Ambos saben que no se trata de su hijo, pero al parecer, la terrible necesidad del jefe de bomberos por volver a cuidar de alguien, o por intentar apagar el dolor de la perdida, soterrarán cualquier detalle de esta extraña y tensa relación. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar, a fingir, para sentirnos completos otra vez?
No tengo idea de cómo clasificar este film, no sé si se trata de horror u otra cosa, pero sin duda es una historia weird, extrema y perturbadora, con escenas explícitas de violencia y crueldad, pero también con temas profundos y espectaculares actuaciones. Reflexioné sobre muchísimas cosas, y me sentí en momentos enojado y hasta asqueado. El arte cuando en verdad vale la pena, nos pone en crisis.
Para terminar, al igual que las otras películas de la directora, cuenta con un soundtrack buenísimo: The kills, LSD Melodie, Caterina Caselli, The zombies, y otros.
Título: Titane
País: Francia y Bélgica
Directora: Julia Ducournau
Año: 2021
Tiempo: 108 minutos
Casting: Vincent Lindon, Lais Salameh, Agathe Rousselle y Garance Marillier (Raw).
Ilustraciones: póster del film y fotogramas:
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