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Poesía y Humanidades

Los marcianos llegaron ya y llegaron bailando ricacha | Apología de lo mundano #05

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Apología de lo mundano #05, una columna de Paola Arce


Una de las temáticas más exploradas en el mundo cinematográfico es el encuentro de la raza humana con seres de otros planetas. No resulta extraño que las inquietudes y dudas que más apremian nuestro quehacer se relacionen con preguntas existenciales ¿estamos solos? ¿hay alguien allá afuera? ¿de existir, cómo son? Estas dudas han tratado de ser respondidas por diferentes equipos de escritores y directores a lo largo del tiempo, dando desde su particular visión una respuesta, creando una cosmovisión basada en diferentes mitos y referencias de la cultura popular; por eso, en esta ocasión, traigo para ustedes algunas de las mejores películas sobre aliens.

Las historias de los seres extraños de otros planetas se ubican en diferentes géneros y giros argumentales, y en ocasiones salen de la típica historia con grandes monstruos que tratan de apoderarse de nuestro preciado planeta por los recursos que ya nos hemos encargado de agotar. Una de estas historias divergentes es La llegada (2016), dirigida por Denis Villeneuve. Todo comienza con el arribo de doce naves extraterrestres en diferentes lugares del mundo, claro que, es el gobierno de los Estados Unidos el que se encarga de tomar cartas en el asunto para descubrir las intenciones de los seres. Para esto se solicita la presencia de la Dra. Louise Banks (Amy Adams), una lingüista renombrada, y el Dr. Ian Donelly (Jeremy Renner), un físico importante en su campo, ellos son los encargados para tratar de establecer comunicación con los aliens. La particularidad de esta película está en su manera de ser narrada, saltando de una línea temporal a otra, y en la exploración e importancia que se le da en la película al lenguaje. Vamos descubriendo junto con la protagonista los recovecos del lenguaje de los seres espaciales, se explora como una manera que determina la forma en que miramos el mundo, se trata de un puente de crecimiento del pensamiento y muestra que el potencial abierto cuando se descubren nuevas maneras de comunicación no radica únicamente en una función de entendimiento con los otros. El logro de representar la llegada de otra civilización se encuentra en la representación del tiempo y las decisiones tomadas en la vida como un viaje circular, que no precisamente encuentra un principio y un fin claramente identificables. Otra de las particularidades de esta película es el concepto de estos seres que no tienen forma antropomórfica ni hablan inglés; a través de ellos se da esa licencia de imaginar nuevas formas de vida alejadas de nuestros estándares. Es una película con un sentido y color un tanto sombrío, que invita a la reflexión, además de brindarnos una trama interesante.

Otra película que sale de los lineamientos comunes de la invasión es Señales (2002) dirigida por M. Night Shyamalan, y protagonizada Mel Gibson en el papel del Reverendo Graham Hess. Un thriller que causó más de un trauma infantil, pues se utilizan referencias y recursos que podían confundirse con situaciones reales. Todo comienza con diferentes agroglifos apareciendo en distintas partes de planeta; en la realidad existen muchas historias sobre ellos, en donde figuras geométricas aparecen dibujadas en campos de cultivo para el asombro de quien las mira. Diferentes teorías acerca de su creación, pero nunca con un consenso claro, lo cual permite seguir creando historias alrededor de ellos. Este recurso brinda a la película el sentido de que es algo que “podría ocurrir” o que incluso ya está ocurriendo. El propósito de estos seres es exterminar a la raza humana mediante un veneno que se expulsa de sus muñecas. Existe una escena emblemática en donde uno de los alienígenas es captado en cámara ante los ojos horrorizados de varios testigos, esta escena circuló en el internet de los años 2000’s como una prueba fehaciente de la presencia de alienígenas en el planeta. En esta película se exploran, precisamente, las concepciones y teorías conspirativas relacionadas a la existencia de otros seres vivos en el universo, además de envestir en la figura del Reverendo Graham Hess los conflictos y contraposiciones que hay en la fe, no sólo de un ser divino mayor sino de tantas otras cosas que desconocemos. Y es precisamente este hecho, la incertidumbre, la característica especial de esta película: el miedo por lo desconocido.

Dejando de lado el drama y el suspenso llega Paul (2011), una comedia dirigida por Greg Mottola. Protagonizada por Seth Rogen como Paul el extraterrestre, Simon Pegg como Greame Willy, y Nick Frost como Clive Gollings. Esta película nos cuenta las aventuras de dos amigos obsesionados con el Area 51 que realizan un viaje en busca de comprobar sus teorías conspirativas, en su travesía se encuentran con el alienígena Paul, que escapa del gobierno de los Estados Unidos, pues había permanecido cautivo por años trabajando para ellos hasta que se tomó la determinación de matarlo para experimentar con su cuerpo. Más allá de una profundidad narrativa, Paul es la forma irónica de tratar los clichés acerca de estos temas, parecido al objetivo de señales, pero con su particular forma de comedia. El personaje interpretado por Kristen Wiig, es Ruth Buggs, una mujer que fue criada con creencias religiosas que trae a colación el combate religión vs ciencia, una pelea que pareciera inagotable pero que es sofocada, de una manera muy divertida y concreta, por Paul en una escena de dos minutos. Lo que podemos resaltar de esta película es el alivio cómico que brinda al género con la desmitificación de la figura.

Cada una de estas tres películas ofrece una narrativa, reflexión y conclusión distintas sobre un mismo fenómeno. Como menciones honorificas quisiera nombrar también la saga de Alien (1979- 2017), que se coronó como un icono de la cultura, regalándonos grandes escenas que forman parte de los recuerdos de todos. Gasta aquellos que no la han visto conocen al bicho, y además tiene la presentación de un ser extraterrestre más violenta del mundo del cine. Hombres de negro (la de 1997), por ser otra película cómica irreverente y bien lograda; y finalmente Venom (2018), por pertenecer al mundo de los comics con un universo y razón de ser diferente a las anteriores.

Lo invito, querido lector, a disfrutar de un tiempo agradable descubriendo estas películas y comparar cuál de todas es la que más se acerca a sus creencias propias ¿Qué otras películas de aliens conoce?