Pink Flamingo más que ser cine basura es un cine que muestra los desperdicios de la sociedad ante el espectador | de la sección ENCUENTRO CHALADO

Entrega de la sección ENCUENTRO CHALADO, de Jasmin Carmina

Hoy el director cinematográfico John Waters cumple 75 años de edad. Y siendo una admiradora de su escarchado, extravagante e incómodo trabajo dedicaré esta sección a una de sus obras, seguro la más conocida, Pink Flamingo.

Pink Flamingo se estrenó el 17 de marzo de 1972, y según Vidal Tamayo “viene siendo la obra cumbre de otros dos subgéneros cinematográficos. Por un lado entra de lleno en el trash -que más que ser cine basura es un cine que muestra los desperdicios de la sociedad ante el espectador-, y por otro inaugura el escatológico”. Este film suda lo escatológico, desde la ruptura de los personajes arquetípicos del cine norteamericano de los 70’s hasta la representación de un mundo decadente en el cual la moral y las leyes de convivencia son abruptamente nulas. Divine es el personaje principal, una drag-queen obesa que vive en un remolque afuera de Baltimore junto con su familia con peculiares fetiches (desde comer compulsivamente huevos, hasta el voyeurismo), ella tiene el título de “La persona más repugnante del mundo” y lo lleva con mucho orgullo, sin embargo los Marble (quienes venden heroína en las escuelas y secuestran a bebes para venderlos a parejas lesbianas) intentan arrebatarle ese absurdo título por lo que una lucha empieza.

El final, la escena triunfante es simplemente impactante y para un estómago muy fuerte. El carisma de Divine y su protagonismo constituye lo más sui generis filme. Así que si van a ver este film asegúrense de tener un buen estómago, uno fortísimo.